Una vez màs atravesè distancias para llegar hasta èl.Una vez màs recorrì los kilòmetros que nos unen.Ya no siento que las distancias nos separen.Una vez me dijo que el mismo camino que yo decìa que nos distanciaba , era el mismo que nos unìa.Y es asì aunque a veces me cueste sostenerlo.No es fàcil entregarse a un hombre y no poder tocarlo cada dìa al amanecer , pero el
placer que èl me da, bien vale las làgrimas que derramo sin querer.
Hoy, sin sesiones bdsm, sin juegos sexuales, sentì que llegamos lejos.
Ibamos en su auto disfrutando del paisaje.Me conducìa como quien lleva a su princesa de paseo.Y yo, sòlo podìa pensar en que ese hombre que estaba delante, al volante guiando el auto,es quien guìa mi vida desde hace casi cuatro años.La guìa...no la decide.Porque en este juego de dominaciòn y sumisiòn, siempre tuve la llave para cerrar el juego, o dejarlo fluir libremente.
Conversàbamos como dos entrañables amigos, riendo de a ratos...compartiendo algo de beber...como si desde siempre hubièsemos sido asì, el uno para el otro.Y en medio de ese bienestar, surgiò mi confesiòn: ya no me alcanza con jugar y solo ser su kajira. Necesito màs.Lo necesito a èl.Y eso que para algunos podrìa ser sencillo de solucionar, para nosotros no lo es.
Ahora mismo lo estoy esperando.Pero no es una espera vana.Sè que vendrà.Esa certeza lo caracterizò desde el principio.Jamàs tuve dudas de èl.Apenas nos separan unos trescientos metros...nada! Y sè que viene por mi, por su kajira, por sentirme suya.Viene a darme placer y a llevarse consigo toda mi entrega.
Me vence el cansancio pero el saber que èl viene a mi , hace que todo se disipe.
Ya todo està como el espera...las sogas...las esposas...alguna cadena ...sus fetiches favoritos y los mìos.No puedo dejar de humedecerme como el primer dìa que lo sentì a travès del chat.Solo leyendo sus palabras lograba extasiarme.Un hombre asì, es quien puede lograr de mi lo que sea, y eso tendrà...